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Visitamos este restaurante para disfrutar de una deliciosa experiencia gastronómica. El café Mocca que pedimos estaba realmente delicioso, al igual que los scones acompañados de mermelada casera. El lugar en sí es precioso, con un ambiente amplio y luminoso, y un generoso espacio verde. Tienen mesas tanto en el interior como en el exterior, lo cual brinda diferentes opciones para disfrutar. El servicio fue excepcional, con un personal muy atento y amable. También vale la pena mencionar que en otra sección del local se encuentra la tienda de ropa de Rotunda.
Excelente experiencia culinaria, con platos deliciosos, destacando especialmente las entradas. El servicio es atento y el ambiente es encantador. Además, tuvimos la grata sorpresa de recibir los cafés como cortesía debido a un retraso en la entrega de los postres.
Mi visita al restaurante fue realmente decepcionante. Cuando llegué con mis acompañantes, pedí agua y tenía la intención de disfrutar tanto el desayuno como el almuerzo en ese lugar.
Excelente experiencia. El restaurante cuenta con un hermoso jardín para disfrutar de los días soleados, y un salón muy luminoso gracias a sus grandes ventanales. ¡Ideal para una comida inolvidable!
Tras numerosas visitas a Otero y Nona, locales pertenecientes al mismo propietario, he notado que la calidad de los platos puede variar considerablemente. A pesar de estar acostumbrado a sus porciones más bien reducidas, mi última experiencia sobrepasó los límites de lo aceptable, convirtiéndose en algo completamente irracional y evidenciando una clara estrategia para disminuir aún más la cantidad de comida servida a los comensales.
Opinión sobre el servicio en un restaurante: Experimentamos un tiempo de espera de aproximadamente 50 minutos para que nos trajeran el té, lo cual resultó muy decepcionante y nos llevó a decidir irnos. Además, notamos que, al momento del cierre, la alarma resultó molesta para todos los vecinos del barrio. A pesar de que la empresa de seguridad Kaibil fue contactada y prometió acudir, finalmente no lo hizo debido a que se encontraban ocupados en otra zona. Sería conveniente que el restaurante considerara su impacto en la comunidad local y mejorara estos aspectos para brindar una experiencia más positiva a sus clientes.
Fui a desayunar en familia y la experiencia culinaria fue increíble. Las porciones eran adecuadas y el sabor exquisito. El ambiente del restaurante era muy agradable, aunque el servicio podría haber sido un poco más ágil.
El restaurante tiene una decoración encantadora y el servicio es excelente. Aunque su selección de platos es limitada, son deliciosos y a precios asequibles. Además, ofrecen descuentos para clientes Santander. Recomiendo probar el omelette surprise sin brownie en la base, optando por un pionono o base de galletitas en su lugar para no hacer el plato tan pesado, ¡aunque es exquisito! La milanesa también es muy sabrosa.
Qué hermoso lugar. Se encuentra ubicado en una encantadora casona en Carrasco, donde se arman mesas con sombrillas en su jardín delantero. Además, cuenta con mesas en el interior que están integradas al jardín, y destaca una especie de galería cubierta de vidrio con un sofá central y mesas individuales distribuidas de manera cercana entre sí.
El desayuno fue maravilloso y el servicio realmente destacable. Aunque el café era un poco suave para mi gusto y el ambiente estaba algo caluroso al principio, la situación mejoró considerablemente cuando abrieron los ventanales permitiendo que entrara el fresco aire marino.