Mostrando del 1 hasta el 10 de 10 comentario(s) recibido(s).
Al ingresar al restaurante, experimentamos una atención deficiente por parte del personal, tuvimos que esperar más de 15 minutos para que limpiaran la mesa en la que nos sentamos y aún más tiempo para que nos atendieran. Además, al finalizar nuestra visita, descubrimos que muchos platos no estaban disponibles, lo que resultó en una experiencia frustrante y una pérdida de tiempo de más de media hora. Encontramos que hay otros restaurantes cercanos con precios más accesibles y un personal más amable.
El personal de atención al cliente es muy acogedor y amable, creando un ambiente cálido en el restaurante. La selección musical contribuye a una experiencia agradable. Los precios son razonables y accesibles. En cuanto a la comida, aunque los platos son sabrosos, algunos clientes han notado que la paella puede mejorar en su preparación, ya que el arroz puede llegar a estar apelmazado o parecer recalentado.
Forma parte de un exclusivo club social, ubicado en la planta baja.
Una terraza muy agradable ubicada en una calle lateral cerca del centro. Ofrece una cocina de calidad a precios más accesibles que otros restaurantes de la zona. Además, destacan por sus excelentes combinados y un servicio bastante eficiente. Sin duda, uno de los lugares más recomendables para visitar en La Pedrera.
Terraza encantadora. Equipo cosmopolita. Amplia variedad en el menú, con numerosas opciones vegetarianas.
El restaurante resultó ser un poco caro en comparación con la calidad de la comida que probamos, en este caso la pesca del día. A pesar de esto, destaco que ofrecen una amplia selección de cervezas y el ambiente del lugar es muy agradable y acogedor. También tuvimos la suerte de visitar durante un evento de vinos, por lo que pudimos disfrutar de una interesante variedad en esa área también.
Probamos algunas tapas como entrantes con la intención de probar un plato principal después. Las tapas estaban deliciosas, sin embargo, el resto de la experiencia fue decepcionante. El aderezo era básico, solo ofrecían mayonesa y ketchup empaquetados, además no trajeron pan ni aperitivos. El servicio fue extremadamente lento, tuvimos que esperar mucho tiempo con las tapas ya servidas y sin recibir ningún acompañamiento adicional. Al final, decidimos no pedir el plato principal debido a la falta de atención.
El local destaca por su encanto y la deliciosa gastronomía que ofrece, incluyendo opciones vegetarianas que son muy valoradas en la zona. Aunque los precios pueden considerarse elevados, esto es comprensible dada la temporada y la tendencia general de establecimientos en la zona a fijar tarifas altas. Es ideal para quienes buscan una experiencia única y están dispuestos a invertir un poco más en la ocasión.
Cuando llegamos al restaurante, la atención dejó mucho que desear. A pesar de no estar muy concurrido, el personal nos ignoraba y parecía que no querían atendernos. Una camarera que llamamos nos indicó que solo se encargaba de limpiar las mesas y que no podía atendernos. Después de esperar una hora sin ser atendidos, pedimos la carta a otra camarera, quien también parecía ocupada. Finalmente, cuando logramos ser atendidos, nos informaron que no tenían disponible la picada que queríamos compartir.
En términos generales, es un restaurante excelente. La comida es fresca, deliciosa y no resulta pesada en el estómago. Sin duda, lo recomendaría a cualquiera que busque una experiencia culinaria agradable.
