Culto Café - Montevideo

Espacio ruidoso che. Llegamos y estuvimos esperando 10 minutos al lado de la caja pa' pedir y las chicas pasaban, iban y venían diciendo "disculpame, en un ratito te atiendo" y solo preparaban cafés y servían en las mesas. Una vez que pedimos, y no fue nada del otro mundo: un café con leche, un capuchino, un tostado y un chipá, nos dijeron que lo traían a la mesa ¡y tardaron 15 minutos! Me parece una locura la espera inicial y la del pedido para un café al paso. Y por si fuera poco, los cafés llegaron re fríos. ¡Y el café con leche era puro leche! No tenía gusto a café. En la mesa no había ni azúcar, ni edulcorante, ni cuchara o palito, ni servilletas y cuando nos trajeron las cosas no nos dijeron "acá está el pedido, las cosas pa' el café están al lado de la puerta de entrada". O sea, además de que ya estaban fríos tenía que caminar 10 metros pa' buscar azúcar o edulcorante, ¡que locura!

Me pasó lo mismo a mí con esta cafetería, me la recomendaron y me dijeron que tenía un café de primera en Montevideo. Me animé a probar el capuchino y el croissant, gasté $510 en total. La verdad es que el café estaba bárbaro, me quedé con ganas de probarlo en otras preparaciones (pido disculpas de antemano por destrozar ese arte latte tan lindo, pero no me pude resistir). El croissant estaba riquísimo y acompañó de diez al café.

La medialuna de Telma, ¡qué rica que está! Súper fresca, suavecita y crocante. Pedí un Long Black, y también exquisito, su café de especialidad es riquísimo, de altísima calidad. ¡Seguro volveré a pedir! 😻🫶🏻

Me encanta que tengan la opción de pedir tus preparaciones con leche de avena, el cappuccino estaba riquísimo con esa leche.

Hacía tiempo que no iba y la verdad que no me fui contenta, che. Me atendieron rápido pero después el pedido demoró casi 40 minutos en llegar a mi mesa. ¡40 minutos por un café y un chipá relleno de jamón y queso, mirá vos! Sacaban los cafés con una lentitud tremenda y encima se equivocaron llevando el pedido a otra mesa. ¡Las personas que pidieron después recibieron su pedido antes que yo! Cuando me levanté a reclamar, el pibe me miró con una antipatía... ¡Una cosa de locos! Después se acercó para decirme que habían demorado por un inconveniente. Vi con mis propios ojos cómo al chipá, antes de calentarlo, se le resbaló del plato a la mesada. El flaco lo agarró con la mano y lo devolvió, ¡imperdonable! Por estas cosas no estoy de acuerdo en que se cobre la propina cuando se pide en mostrador, ¿cómo saber de antemano si el servicio va a ser bueno?

El rinconcito es re lindo, espacioso, con mesas adentro y afuera. ¡Una belleza!

Se demoró un toque el pedido porque había bastante gente. Las chicas atienden de diez, el lugar está re lindo. El alfajor y el café son una delicia. Un lugar tremendo para pasar el rato ☕️

La onda del lugar está piola, bien sencillo y re tranqui.

Fue la primera vez que fui y la verdad me llevé una desilusión, pedí un croissant que zafaba nomás, y un capuchino que estaba helado.

La comida estaba re-buena. El café un poquito más ácido de lo que me gusta, pero igual un lugar muy bueno, che.