Parador Arequita - Minas

Lindo lugar, todos re piolas, la comida batísima y a buen precio.

Siempre que pasamos por las minas, pasamos por allá, ¡muy recomendable! La comida está riquísima.

Qué tal el parador, che. Se re mantiene la tradición del lugar. Los platos son servidos bien y a un precio piola. Te recomiendo el flan casero con dulce de leche, una delicia. La atención es re cordial. La vista está bárbara y hay lugares re lindos para recorrer por ahí. Si andan por Minas, re vale la pena ir.

Hermoso ambiente familiar, buena atención y comida. Los postres están muy bien. El precio es adecuado. ¡Ojo! Solo aceptan efectivo. Está ubicado en un entorno muy agradable a orillas del río Santa Lucía. Recomendado para disfrutar de un almuerzo en familia. ¡A la orden!

Qué tal, che! Una joyita este parador en las afueras de Minas, al lado del Río Santa Lucía donde en verano se llena de gente disfrutando del agua. Lindo lugar, con un servicio de diez a pesar de la cantidad de gente, y unos precios muy buenos en relación a la calidad. Las porciones son bien generosas y los platos están re bien preparados. Totalmente recomendado, vale la pena hacer una parada en el camino para comer ahí. ¡Un golazo!

Comida rica, casera y muy acorde a cualquier lugar de balneario del país, lo único es que de lunes a jueves no hay parrillada, solo viernes a domingo, ¡una lástima!

Comida rica y abundante, ¡muy buena onda el servicio!

Lindo lugar para almorzar o cenar..comimos pulpo con papas fritas y ensalada completa..muy rico y a buen precio..de postre frutillas con crema y la isla flotante deliciosa.

Qué lugar más encantador, con un entorno hermoso cerca del río. Los mozos son re buena onda, siempre atentos a los clientes. La comida es abundante y riquísima. La napolitana con papas fritas y los canelones de choclo con salsa carusso son una delicia de verdad. El falso chajá, el dulce de zapallo y el brownie, todo casero y espectacular. Y el precio nos pareció super accesible. Sin dudas, vamos a volver pronto.

Qué lindo lugarcito para almorzar o cenar, ¡los precios son re accesibles! Súper agradable el ambiente y la tranquilidad que se respira, definitivamente hay que conocerlo y dedicarle un ratito para parar acá. La comida está riquísima y las porciones son bien generosas. Si estás acampando en Arequita, también conviene venir aquí si no querés hacer fuego o si no estás muy preparado (nuestro caso jeje)