Posada CampoTinto - Carmelo

Fuimos el año pasado y fue una experiencia increíble. Nos quedamos a dormir y Juan, que nos explicó cada vino, fue increíble y la comida fue muy buena. Este año fuimos solo para almorzar y no tiene nada que ver la comida y la experiencia. Primero llegamos y estaba cerrada la recepción hasta noviembre porque tienen todo alquilado para cazadores, literalmente eran todos yanquis que vinieron a cazar (hasta cazan palomas y nos dijeron que más comen). Nos llevaron a almorzar a la bodega de atrás, donde nos ofrecieron 4 platos para elegir. Yo había elegido arroz con vegetales salteados (pensando que iba a tener alguna rica salsa o algo). Durante todo el tiempo escuchamos cómo calentaban cada plato en el microondas, el plato una vergüenza, vegetales hervidos sin NADA de sabor y te termina saliendo lo mismo que el plato de cordero. El precio no tiene sentido. Si van, vayan después de noviembre hasta marzo para que vuelva la experiencia anterior que es mejor.

Estuvimos en Campotinto durante el pasado fin de semana.||Qué linda bodega ubicada a poquitos kilómetros de la ciudad de Carmelo, en un entorno espectacular. Las instalaciones son divinas, todo muy cuidado.||El personal, TODO, super amable y...

Una ubicación tremenda. Re cerca del centro de Carmelo, che.

Espectacular Posada en Carmelo, tiene vinos propios, restaurante, piscina al aire libre, bicicletas para recorrer la zona y un gran terreno para disfrutar. Muy buena atención de todo el personal, re atentos y todo muy personalizado. Algo muy...

Destacable el ambiente y la tranquilidad, pero si hablamos del local en relación al costo-beneficio, es un poco caro... sobre todo considerando el nivel de servicio que es bastante básico y hasta descuidado en cuanto a hacer sentir mimado al cliente, detalles como: éramos 3 personas y el servicio de la pieza solo tenía insumos disponibles para 2 (a pesar de haber hecho reserva), el desayuno muy poco variado, tenías que pedir para repetir el jugo, en la cena solo una variedad de plato principal y postre (es decir, no se podía elegir entre otras opciones) y si no preguntás, no te dicen cuál es el menú, te enterás en ese momento...

Llegamos por una degustación de vinos que estuvo re barbara. Pepe fue nuestro anfitrión y la verdad que es un capo, me re sorprendió. La cena estuvo exquisita, los platos son re abundantes (la ensalada César que sirven como entrada está re canchera...

Hermosa posada para disfrutar en familia. Las habitaciones son re amplias, están limpias y ordenadas. El espacio afuera está re bien cuidado. La piscina es un poco chica para la cantidad de huéspedes y a veces faltan toallas. Las bicicletas están en buen estado. El desayuno está re bien y las cenas que ofrecen son muy ricas. Pensamos que eran un poco caras, pero valen cada peso. La atención es excelente, hay una buena predisposición a ayudar en todo momento.

Hemos ido en varias oportunidades, y pensamos volver cada vez que tengamos chance. Desde el arranque nos hicieron sentir como en casa. Amabilidad, respeto, y profesionalismo de parte de todas las personas que laburan ahí. El lugar a nuestro entender es perfecto, una postal de campo con los viñedos para recorrer a gusto del consumidor. Los vinos exquisitos, la comida muy rica, aunque hay pocas opciones, lo cual pesa si la idea es quedarse varios días. De todas maneras, en los alrededores hay varias alternativas, así que lo gastronómico no es un impedimento.

Ubicación de primera, re cerca del centro de Carmelo, che.

La atención de los empleados es bárbara, pero para mi paladar, considerando la distancia hasta la ciudad, deberían brindar más servicios en la panadería.